Por Redacción
Afirmó que durante su administración habrá una separación del poder económico del poder político y que el gobierno no va a ser un comité al servicio de una minoría rapaz.
“El otro distintivo de nuevo gobierno será la separación del poder económico del poder político. El gobierno ya no será un simple facilitador para el saqueo, cómo ha venido sucediendo, ya el gobierno no va a ser un comité al servicio de una minoría rapaz. Representará a ricos y pobres, creyentes y librepensadores, y a todas las mexicanas y mexicanos, al margen de ideologías, orientación sexual, cultura, idioma, lugar de origen, nivel educativo o posición socioeconómica. Habrá un auténtico estado de derecho, tal como lo resume la frase de nuestros liberales del Siglo 19: Al margen de la ley nada y por encima de la ley nadie”.
Andrés Manuel López Obrador afirmó que su gobierno propone que no se investigue ni persiga a quienes podrían haber cometido actos de corrupción en administraciones anteriores, porque no apuesta al circo y no habría cárceles suficientes.
“Si me piden que exprese en una frase el plan del nuevo gobierno respondo: acabar con la corrupción y con la impunidad. Pero al contrario de lo que pudiera suponerse, esta nueva etapa la vamos a iniciar sin perseguir a nadie, porque no apostamos al circo y a la simulación”.
“Queremos regenerar de verdad la vida pública de México, además, siendo honestos, como lo somos, si abrimos expedientes nos limitaríamos a buscar chivos expiatorios, como se ha hecho siempre, y tendríamos que empezar por los de mero arriba, tanto del sector público como del sector privado, y no habría juzgados ni cárceles suficientes”.
“Y lo más delicado, lo más serio, meteríamos al país en una dinámica de fractura, conflicto y confrontación, y ello nos llevaría a consumir tiempo, energía y recursos, que necesitamos para emprender la regeneración verdadera y radical de la vida pública de México, la construcción de una nueva patria, la reactivación económica y la pacificación del país”.
Aseguró que su fuerte no es la venganza y que lo esencial es que la nueva administración no cometa actos de corrupción.
“Estamos ante un asunto político de Estado y como tal debemos enfrentarlo. Mi postura al respecto, la definí con toda claridad desde la campaña, dije que no es mi fuerte la venganza y que si bien no olvido, si soy partidario del perdón y la indulgencia”.
“Además, y esto es muy importante, creo precisamente que en el terreno de la justicia se pueden castigar los errores del pasado, pero lo fundamental es evitar los delitos del porvenir. En consecuencia, propongo al pueblo de México que pongamos un punto final a esta horrible historia y mejor empecemos de nuevo”.
“En otras palabras, que no haya persecución a los funcionarios del pasado y que las autoridades encargadas desahoguen en absoluta libertad los asuntos pendientes. Por cierto, hoy se constituye una comisión de la verdad para castigar los abusos de autoridad, para atender el caso de los jóvenes desaparecidos de Ayotzinapa”.
“Que se castigue a los que resulten responsables, pero que la Presidencia se abstenga de solicitar investigaciones en contra de los que han ocupado cargos públicos o se hayan dedicado a hacer negocios al amparo del poder durante el periodo neoliberal”.
Andrés Manuel López Obrador indicó que aunque sostiene que no se deben abrir expedientes en contra de funcionarios anteriores, someterá a consulta la posibilidad de juzgarlos.
“Desde mi punto de vista, en las actuales circunstancias, es más severa y eficaz la condena al régimen neoliberal, dejar en claro su manifiesto fracaso y su evidente corrupción, y hacer todo lo que podamos para abolir el régimen neoliberal, que someter a procesos judiciales o a juicios sumarios a sus personeros, quienes a fin de cuentas no dejan de ser menores, ante la esperanza de todo un pueblo y la fortaleza de una nación como la nuestra”.
“Pero de cualquier manera, como en todos los asuntos de trascendencia para la vida pública del país, yo defenderé con libertad y argumentos mi postura del punto final y de pensar y trabajar hacia el porvenir. Pero la ciudadanía tendrá la última palabra”.
“Porque todos estos asuntos se van a consultar a los ciudadanos. También aclaro que sí se acepta mi propuesta de mantener al margen de este asunto al Poder Ejecutivo, tal determinación se aplicará para los de antes y para los que se van, no para nosotros, quienes mantendremos en alto el ideal y la práctica de la honestidad”.
“Empiezo por informar que hemos promovido una ley para convertir la corrupción en delito grave que, aunque parezca increíble, no lo era”.
El presidente constitucional se comprometió a no robar y precisó que no permitirá que ni siquiera sus familiares y amigos se aprovechen del poder público.
“Con apego a mis convicciones y en uso de mis facultades, me comprometo a no robar y a no permitir que nadie se aproveche de su cargo o posición para sustraer bienes del erario o para hacer negocios al amparo del poder público”.
“Esto aplica para amigos, aplica para compañeros de lucha y familiares. Dejo en claro que si mis seres queridos, mi esposa, mis hijos, cometen un delito, deberán ser juzgados como cualquier otro ciudadano. Yo sólo respondo por mi hijo Jesús, por ser menor de edad”.
“En cuanto a mi persona, he promovido la reforma al artículo 108 de la Constitución, para eliminar la impunidad y los fueros de los altos funcionarios públicos. Empezando por el presidente de la república, quién ahora, según la iniciativa de ley que hoy, este día, estoy enviando al Senado, podrá ser el presidente de la república juzgado como cualquier ciudadano por el delito que sea, aun estando en funciones”.
“Un buen juez por la casa empieza, pondremos orden en la cúpula del poder porque la corrupción se promueve y se practica fundamentalmente desde lo alto hacia los niveles inferiores. Es decir, vamos a limpiar al gobierno de corrupción de arriba para abajo, como se limpian las escaleras”.
FUENTE: www.e-consulta.com